TERRA NULLIUS (VII)
Laureano sintió como la sangre, caliente y pegajosa, le corría por el cuello y le empapaba la camiseta. Se quedó mirando el cuerpo inconsciente de Teté durante unos segundos. Un pequeño pezón rosado asomaba tímidamente por el borde del escote y las piernas, largas y desmadejadas le causaron un amago de erección. Parpadeo un par…