Si me dieran a elegir entre la inteligencia de Alessandra Ambrosio (por poner algún «Ángel») y la belleza de Anna Wintour, está claro que escogería a la dama de hierro de la moda. Esta mujer de peinado impecable (en una mezcla perfecta entre Calimero y he man) es la que parte el bacalao y decide que está «in» y que «out». Es algo así como la Stalin del mundo fashion. No le hagas sombra ni la contradigas porque estarás condenada al ostracismo el resto de tu vida. Y hablando de Ángeles que se someten a regímenes extremos y etapas de gym interminables para lucir bien a los dos meses de dar a luz; está claro que ni en cien vidas que me reencarnase, me dedicaría a ser top model. Me gusta demasiado comer. ¿Por qué tanto sufrir? La que ha sido más que lista es Cara Delevigne que se ha cambiado de chaqueta para unirse al mundo del celuloide (Aún está por ver como se le da el tema). Si es que los ingleses son muy «cucos» y en esto del show business nos llevan anos de ventaja. Claro que la muchacha ya estaba posicionada y dinero no le faltaba y habrá pensado: – Esto de ser modelo es muy sacrificado y además hay mucho intrusismo laboral con tanta celebrity, it-girl, brazos biónicos y demás. Yo voy a probar a cambiar de bando porque total ya hago el chorra gesticulando cual película muda, a ver si con suerte me encuentro con algún director que me pula un poco y ya está todo hecho. Y es que la niña de los gatos acostados encima de los ojos no tiene perrito que le ladre y le sobran padrinos. ¿Dónde hay que firmar para hacer lo mismo? Yo, por si acaso voy a ir dejando de depilarme…
- Vestido: Trucco
- Zuecos: Mango
- Bolso: Ch&Ch
¡Y continuamos para bingo! Después de este «intermezzo» seguimos con la Pasarela Larios que aún que lo más grande…
Nos vemos el viernes
Besos, Petra