Aunque parezca el título de un artículo de revista de decoración, no me refiero a eso, si no a las cientos, miles de casas, cortijos, villas o apartamentos que hay abandonadas en nuestro país. No se si en otros lugares de esta, nuestra piel de toro, el efecto «ciudad fantasma» se hace tan patente con en la tan mal querida «Costa del Sol» (Costa del Golf). Montones de urbanizaciones se apelotonan en las sierras y playas de este abrupto litoral maltratando y aplastando por igual acuíferos, terrenos fértiles e ilusiones de personas. Miles de anuncios a todo color en periódicos locales extranjeros (si, he dicho bien), webs apócrifas y cadenas casposas de dudoso gusto promulgando a los cuatro vientos que como se vive aquí no se vive en ningún otro sitio del mundo: «Marbella Platinum» «Golden Mille» o «Luxury rentals» (siempre en inglés) son algunos de los engaña bobos que nos ciegan con letreros luminosos. Pero aunque el resto de la humanidad parece no darse cuenta; yo sí. Vivimos, los indígenas, en una entelequia que nos lleva a pensar que estamos muy a gusto en este terruño cuando en realidad, todo lo que veis, todo lo que gozáis y todo lo que vivís no es más que lo que los colonos os dejan. En esta tierra de proxenetas que han vendido hasta el último reducto; hasta la camisa al capital extranjero, a los autóctonos lo único que nos queda es ir detrás recogiendo las migas de pan y mirar por el ojo de de una cerradura estrecha cuánto se divierten.
Así que, la próxima vez que pasees por el centro o muelle 1 y pienses lo bonito que está, date cuenta que hay que amortizar tamaño anzuelo construido para pescar cruceros de tres plantas que llevan en sus entrañas miles de individuos que saldrán cual vorágine hambrienta por las terrazas, calles y plazas. Solo de pensarlos se les pone a algunos el símbolo del euro en las pupilas.

Estrenando: Mi nuevo pantalón color «marsala» . Ese tipo de pantalón que parecen sin chicha son un básico indispensable.
– Blazer: Easy Wear
– Pantalón: Formula Joven
– Zapatos: Mustang
Si os parece que soy muy cínica, crítica o que se me ha ido la pinza; decidmelo. Sin opiniones contrarias no hay debate. Y el debate es divertido.
Nos vemos el lunes. Feliz puente.
Besos, Petra