
Y si en el post anterior hablaba del fetichismo y el papel del del zapato de tacón dentro del mismo; hoy toca comentar otra «pauta» sexual o motivo de excitación: La androginia.
Etimologicamente hablando, la palabra viene de la conjunción de las palabras «Andrós» (varón) y «Gyné» (hembra). Y se dice de la persona que causa cierta confusión a nuestros ojos en cuanto a su género.
En moda, que siempre busca sorprender con lo bizarro (tanto para bien como para mal), se ha puesto de moda en los últimos tiempos, sacar en los desfiles modelos muy andróginos, llegando al extremo del top Andre Pejic que ha desfilado más para alta costura femenina que masculina. Diseñadores de renombre buscan el paralelismo y fusionan lo masculino y femenino en sus colecciones y la calle, que bebe (aunque edulcoradamente) de las pasarelas, lo adopta como modus operandi en sus alfombras rojas más «alternativas» pensando que así, van a librarse de la lacra de la mediocridad (algo que algunas llevan intrínseco)
la pregunta es: ¿Estamos ante un claro ejemplo de otro género humano más a agregar entre todos los existentes? Si están los heterosexuales, homosexuales, lesbianas, transexuales, transgéneros, bisexuales….¿Por qué no expandir más este crisol de personas, de humanos, de especies?
Mientras lo dilucidáis, os dejo con un look que explica de manera personal el rollo andrógino.






– Camisa: Primark
– Blazer: Zara
– Lazada: Stradivarius
– Leggins: Calcedonia
– Zapatos: regalo
Y aquí sigo luchando con los hosting, los hackers, los plugins y la madre que los parió……Pero os prometo que no podrán conmigo y la «Tienda Mutante» se abrirá o moriré en el intento.
Nos vemos el miércoles
Besos, petra